A poco menos de un año de ser coronado como Rey de Inglaterra, Carlos III atraviesa un problema de salud del que apenas se conocen detalles. Sin embargo, hay medios que afirman que su cuadro es más grave de lo que se anunció y que la corona británico estaría organizando su funeral.

El sitio estadounidense The Daily Beast, fundado por la periodista británica Tina Brown, es el que reveló la situación que estaría viviendo el monarca, que llegó al trono el 6 de mayo del año pasado, luego de que su madre, la reina Isabel, falleciera a los 97 años.

En febrero, el propio Carlos III anunció que tenía cáncer, pero no dio detalles de qué parte de su organismo estaba afectada por la enfermedad, o cómo evolucionó su tratamiento desde entonces.

En Inglaterra, la salud del rey es un tema tabú. Mientras tanto, el silencio del Palacio de Buckingham le da lugar a los rumores y las teorías conspirativas.

En ese contexto, el medio norteamericano informó que los preparativos del funeral del monarca, conocidos como operación "Menai Bridge" fueron activados "después de preocupantes revelaciones sobre su salud".

Según el reporte, actualmente estaría realizando quimioterapia y rayos, que debilitan su salud. Además, afirman que sus amigos reconocen que "está peor" de lo que se dice públicamente.

No se sabe qué clase de cáncer tiene, cuál es su estadío y cuál es su tratamiento, pero Carlos III viaja semanalmente a Londres para atenderse.

Lo cierto es que su situación de salud se suma a la que está atravesando Kate Middleton, princesa de Gales y futura reina, con un cáncer abdominal; y Sara, la duquesa de York, con un melanoma y cáncer de mama.

La Casa de Windsor tiene la costumbre de no comentar nunca sobre las enfermedades de sus integrantes. De hecho, la reina Isabel falleció por un cáncer de médula ósea, pero la información oficial fue que su deceso se produjo por su edad avanzada.

Por eso, las versiones sobre un estado de salud deteriorado por parte del actual monarca podrían ser ciertos.