Durante la segunda jornada de entrenamientos privados en Barcelona, Lewis Hamilton sufrió un accidente con su SF-23.

El accidente fue en el circuito Montmeló y se estrelló contra las barreras, pero por suerte el siete veces campeón del mundo salió ileso. Los servicios de emergencia actuaron rápidamente.

El monoplaza sufrió daños en partes aerodinámicas y de suspensión, pero este imprevisto termina siendo una complicación para la escudería italiana, ya que con este mismo auto estaba pactado que Leclerc corra en la tanda de la tarde.

El equipo Ferrari aun no confirmó si Hamilton se volverá a subir al auto el jueves para completar la agenda semanal correspondiente. Cabe destacar que, tal como resalta el reglamento de la FIA, los ensayos no pueden extenderse más de cuatro días y cada piloto puede recorrer hasta 1.000 kilómetros en la pista.

Los fanáticos de Hamilton encontraron un curioso patrón en sus redes sociales: cada vez que el británico cambió de equipo en la Fórmula 1, sufrió un accidente en sus primeras pruebas y luego se consagró campeón. Ocurrió con McLaren en 2007 y con Mercedes en 2013. Ahora, la historia se repite con Ferrari.

Hamilton continúa con su adaptación a la Ferrari, y lo hace con el auto que pilotaron Leclerc y Sainz en la temporada pasada, mientras espera por la presentación oficial del nuevo monoplaza.

La misma tendrá lugar el próximo 19 de febrero, una semana antes del comienzo de los tests generales de la Fórmula 1 en Bahréin, pactados para el 26 de febrero.