Durante una presentación en Washington, Santiago Bausili, presidente del BCRA, admitió que "la situación financiera es muy extrema" en el contexto de una crisis cambiaria y financiera que el gobierno enfrenta a días de las elecciones legislativas.

Esta confesión se produce mientras se negocia un salvataje de hasta US$ 40.000 millones con Estados Unidos, anunciado por el secretario del Tesoro, Scott Bessent.

Bausili habló desde Washington sobre la "presión extrema" en el sistema financiero argentino. Explicó que, desde las elecciones de 2019, el mercado ha mostrado una demanda desproporcionada de cobertura cambiaria cada dos años, algo que se repite ahora con intensidad.

El acuerdo incluiría un swap (intercambio de divisas) para estabilizar reservas. Bausili indicó que la documentación está casi lista y que esperan ejecutarlo "muy pronto", aunque no dio fechas precisas.

La economía argentina enfrenta una escasez de dólares críticos, con reservas netas negativas y un dólar paralelo por encima de los $1.500. Esto ha llevado a controles estrictos y tensiones en el mercado de cambios.

La noticia se viralizó rápidamente en X, con publicaciones de medios y usuarios criticando al gobierno.

Estas reacciones reflejan un clima de preocupación y polarización, con énfasis en la urgencia electoral.

¿Qué significa esto para la economía?

Esta admisión de Bausili subraya la fragilidad del sistema: reservas brutas en torno a US$ 25.000 millones, pero netas negativas por unos US$ 10.000 millones.

El salvataje podría aliviar la presión a corto plazo, pero analistas advierten que, sin reformas estructurales (como un acuerdo con el FMI), la "extrema" situación podría agravarse.

El BCRA ha intervenido vendiendo dólares para contener el blue, pero las expectativas de devaluación persisten.