Analistas de instituciones financieras líderes han ajustado al alza sus previsiones para el precio del oro. Citi Research elevó su objetivo a corto plazo a 3.000 dólares por onza y su pronóstico promedio para 2025 a 2.900 dólares, citando las continuas tensiones comerciales y la creciente demanda de los bancos centrales. Por su parte, Goldman Sachs anticipa que el oro podría alcanzar los 3.000 dólares por onza a finales de 2025, tras romper varios récords en el año anterior.

La demanda de los bancos centrales es el motor clave en el aumento del precio del oro. En 2024, la demanda global de oro aumentó un 1%, impulsada por mayores inversiones y compras de bancos centrales.

Además, la incertidumbre económica y las tensiones geopolíticas han llevado a los inversores a buscar activos seguros. Las políticas comerciales agresivas y las disputas arancelarias generan preocupaciones sobre el crecimiento económico global, lo que ha incrementado la demanda de oro como refugio.