J.P. Morgan recorta la previsión de crecimiento económico argentino para 2025
El banco de inversión estadounidense ajustó sus proyecciones y ahora estima un crecimiento del PBI del 4,7% en lugar del 5,3% previsto anteriormente. La revisión está vinculada a la desaceleración de la economía, la volatilidad financiera y la incertidumbre política.
Una corrección a la baja en las proyecciones
El informe de J.P. Morgan publicado este viernes advirtió sobre un escenario menos favorable para la economía argentina. Según el documento, el Producto Bruto Interno crecerá 4,7% en 2025, frente al 5,3% calculado en trabajos anteriores.
El banco reconoce avances en el superávit fiscal y en la reducción de la inflación —que se proyecta en un 26,8% interanual para diciembre de 2025—, pero alerta que la incertidumbre electoral y la inestabilidad de los mercados podrían impactar en el consumo interno, las exportaciones y la estabilidad macroeconómica.
El impacto político y legislativo
El informe dedica un apartado a la difícil semana parlamentaria del Gobierno, en la que perdió la mayoría de las votaciones, aunque logró sostener el veto presidencial a la ley de jubilaciones. Al respecto, el banco resaltó que el oficialismo “pudo evitar el impacto fiscal que hubiera significado el aumento en las jubilaciones y pensiones que impulsaban los distintos bloques opositores”.
Sin embargo, la reiteración de derrotas en el Congreso genera dudas sobre la fortaleza política del Ejecutivo. Según el reporte, la volatilidad de las tasas refleja esa incertidumbre y condiciona el rolleo de deuda propuesto por el Ministerio de Economía que conduce Luis Caputo.
Recuperación económica desigual
En cuanto a la actividad, el estudio marcó que en junio hubo un crecimiento de apenas 0,5% respecto del promedio del último trimestre de 2024. No obstante, la comparación interanual mostró una caída del 0,6% frente a diciembre y del 0,5% respecto del máximo postpandemia de 2022.
Los datos de julio también fueron débiles: se registraron bajas en la venta de autos (-10,4%) y en la producción industrial (-2,8%). En contraste, algunos sectores mostraron señales de recuperación desde el segundo trimestre de 2024: servicios financieros (+27,5%), comercio (+8,3%), construcción (+12,2%) y minería (+7,8%).
Superávit y desafíos fiscales
El banco indicó que el superávit fiscal primario acumulado en julio alcanzó el 1,1% del PBI, y proyectó que llegará al 1,7% en 2025. A su vez, calculó que el resultado fiscal total será de 0,4% del PBI.
No obstante, alertó que el efecto de las supertasas sobre las cuentas públicas “es bajo en el corto plazo”, aunque insistió en que será clave la normalización de las condiciones de mercado para sostener la estabilidad fiscal y monetaria a mediano plazo.