Un ataque masivo de Rusia con misiles y drones contra la infraestructura energética de Ucrania dejó a más de un millón de personas sin luz, según informaron las autoridades ucranianas.

"Los ataques a las instalaciones energéticas están ocurriendo en toda Ucrania", dijo el ministro de Energía, Herman Halushchenko, en una publicación en Facebook.


"En estos momentos, 523.000 abonados de la región de Lviv están sin electricidad", dijo en las redes sociales el jefe regional, Maksym Kozytskyi, mientras que las autoridades dijeron que 280.000 estaban incomunicados en la región occidental de Rivne y otros 215.000 en la región de Volyn.

El presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó este jueves que el último ataque masivo en Ucrania se efectuó en respuesta al uso de armas occidentales de largo alcance contra el territorio ruso.

Por su parte, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski afirmó en su cuenta de la red social X que algunos de los misiles contaban con municiones de racimo.

"Estas municiones de racimo complican de forma significativa el trabajo para reparar los daños provocados por el ataque", escribió el mandatario ucraniano, que calificó el ataque de una "escalada perversa de las tácticas terroristas rusas"

Zelenski agradeció a los trabajadores de emergencias y del sector eléctrico su trabajo para mitigar las consecuencias del bombardeo, que es el décimo primer ataque masivo ruso contra el sistema eléctrico ucraniano desde el pasado mes de marzo.

Autoridades ucranianas han advertido recientemente que Rusia estaba acumulando misiles balísticos y de crucero, presumiblemente para otra campaña aérea previa al invierno contra la red eléctrica de Ucrania.