En un nuevo capítulo de la creciente tensión entre Irán e Israel, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizó una declaración que provocó fuerte impacto a nivel internacional. A través de su cuenta oficial en Truth Social, publicó un mensaje en el que volvió a insistir en que “Irán no puede tener un arma nuclear” y pidió evacuar la capital iraní.

“Irán debería haber firmado el acuerdo que les dije que firmaran. Qué vergüenza y desperdicio de vidas humanas. Dicho simplemente: IRÁN NO PUEDE TENER UN ARMA NUCLEAR. ¡Lo dije una y otra vez! Todos deberían evacuar Teherán de inmediato”, escribió Trump en inglés.

Donald J. Trump (@realDonaldTrump)

Reacción tras el bombardeo de Israel

La publicación se dio apenas horas después del ataque de Israel a instalaciones nucleares y militares en territorio iraní, una ofensiva que dejó como saldo la muerte de altos mandos de la Guardia Revolucionaria y seis científicos. 

Como represalia, Irán lanzó al menos 150 misiles contra objetivos israelíes, algunos de los cuales impactaron en Tel Aviv, profundizando la crisis.

Según trascendió, Trump mantiene contacto permanente con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y que monitorea el conflicto desde la Cumbre del G7 que se está desarrollando en Canadá.

Declaraciones ante la prensa

En medio del conflicto, el presidente estadounidense también habló con periodistas y aseguró: “Irán terminará firmando un acuerdo, o algo pasará, pero ese acuerdo va a suceder”, aunque reconoció que los recientes bombardeos forzaron la suspensión de la ronda de negociaciones que estaba prevista con representantes de Teherán.

Si bien Trump evitó confirmar si su objetivo es un cambio de régimen en el país persa, fue enfático en su postura: “Lo que quiero es que Irán no tenga armas nucleares. Estamos en camino de lograrlo”, remarcó.

La advertencia de Trump no solo acentúa su histórica postura de línea dura contra Irán, sino que también se produce en un momento crítico, con el riesgo de una escalada mayor en Medio Oriente y un nuevo escenario geopolítico que mantiene en vilo a la comunidad internacional.