El desembarco de BYD (Build Your Dreams) en Argentina marca un nuevo capítulo para el mercado de autos eléctricos. La compañía china, considerada la gran rival de Tesla y líder mundial en movilidad sustentable, formalizó la creación de su filial BYD Auto Argentina S.A.U., un paso clave en su plan de expansión en la región.

El ejecutivo Yuan Deng fue designado presidente y único director titular. El estatuto de la filial contempla un abanico de actividades: desde la fabricación y comercialización de autos eléctricos hasta autopartes, baterías, luminarias y servicios de mantenimiento.

Primer lote de SUV eléctricos Yuan Pro

La compañía inició formalmente sus operaciones en el país con la llegada de 110 unidades del SUV eléctrico Yuan Pro, desembarcadas en el puerto de Zárate para completar el proceso de nacionalización. Los modelos aún no tienen precio en concesionarias, ya que su lanzamiento comercial está previsto para el último trimestre del año.

En paralelo, se esperan nuevos embarques que permitirán alcanzar unas 7.800 unidades, parte del cupo de 50.000 vehículos electrificados autorizados por el Gobierno a ingresar con arancel de importación reducido a cero.

Nuevo actor. La compañía china BYD se suma al mercado de autos eléctricos en Argentina.
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Proyección regional de BYD

En una primera etapa, la automotriz trabajará con distribuidores locales, aunque la apertura de la filial deja abierta la posibilidad de avanzar en inversiones directas en infraestructura y producción.

A nivel global, la firma nacida en 1995 como fabricante de baterías alcanzó 4,27 millones de unidades enchufables vendidas en 2024, consolidando su liderazgo mundial. Su modelo de integración vertical le permite reducir costos y competir con precios más accesibles.

En América Latina, BYD ya construye una planta en Brasil y participa activamente en el transporte público eléctrico de Bogotá, Santiago y São Paulo. En Argentina, su llegada coincide con un mercado en expansión, donde el régimen de importación sin arancel permitió casi 50.000 vehículos eléctricos e híbridos, de los cuales un 63% corresponde a marcas chinas.