20/05/2025
Un nuevo protagonista en el universo tech
El mundo de la tecnología vestible no para de evolucionar. Después de los relojes inteligentes y las pulseras de actividad, ahora es el turno de los anillos inteligentes. Estos pequeños dispositivos, que parecen simples accesorios, esconden en su interior una sorprendente capacidad para recolectar datos corporales y ofrecer métricas clave sobre el estado físico y emocional del usuario.
Si bien su desarrollo lleva algunos años en mercados como el estadounidense o el europeo, en Argentina recién comienzan a aparecer en los catálogos de productos tech. ¿La razón principal de su reciente popularidad? La combinación entre diseño minimalista y funciones avanzadas de salud.
¿Qué funciones tienen estos anillos?
Los anillos inteligentes se presentan como una alternativa discreta y cómoda a los relojes y pulseras. Entre sus funciones más destacadas, se encuentran:
Medición del ritmo cardíaco en tiempo real.
Seguimiento del sueño (fases, duración, eficiencia).
Monitoreo del nivel de oxígeno en sangre.
Detección del nivel de estrés o carga corporal.
Contador de pasos y calorías.
Control de la temperatura corporal.
Todo esto es posible gracias a sensores integrados en el interior del anillo, que entran en contacto directo con la piel del dedo. Muchos modelos también se sincronizan con aplicaciones móviles que procesan los datos y ofrecen recomendaciones personalizadas.
Marcas disponibles y modelos en Argentina
En el país, todavía no hay una gran oferta de estos dispositivos, pero algunas tiendas especializadas ya comercializan modelos importados de marcas reconocidas:
Ultrahuman Ring Air: uno de los más avanzados del mercado, con diseño premium y una app muy completa. Tiene sensores para seguimiento metabólico, sueño, recuperación y estrés.
Ringconn: más económico, pero con una propuesta sólida que incluye batería de larga duración (hasta 7 días), resistencia al agua y diseño cómodo para uso diario.
Ambos modelos pueden conseguirse a través de distribuidores locales, plataformas de e-commerce o incluso importándolos de manera particular desde sitios del exterior.
¿Cuánto cuestan en Argentina?
El precio de un anillo inteligente en Argentina varía considerablemente según el modelo, la importación y la tienda que lo comercialice.
El Ringconn, el más accesible, ronda los US$ 300, lo que equivale a unos $270.000 a $300.000 pesos argentinos al tipo de cambio actual.
El Ultrahuman Ring Air, por su parte, se consigue a partir de los US$ 349, lo que lo ubica en la franja de los $350.000 a $500.000 pesos argentinos, dependiendo del margen de ganancia del vendedor y los impuestos aduaneros.
Además del costo inicial, es importante tener en cuenta que algunos modelos requieren una suscripción mensual a las apps para acceder a todas sus funciones avanzadas, algo que también influye en el costo total del producto.
¿Vale la pena comprar uno?
La decisión de invertir en un anillo inteligente depende del uso que se le quiera dar. Para usuarios que ya están habituados a los relojes inteligentes, puede ser una alternativa más cómoda y discreta. También es ideal para quienes valoran el diseño minimalista y no quieren llevar algo voluminoso en la muñeca.
En cuanto a precisión, los anillos suelen ser muy confiables para monitoreo del sueño y ritmo cardíaco, aunque algunos expertos señalan que no reemplazan un dispositivo médico ni ofrecen información 100% clínica.
Sin embargo, son herramientas útiles para seguir hábitos, mejorar el descanso y prevenir signos de fatiga o estrés crónico, especialmente para quienes llevan una vida activa o tienen rutinas exigentes.
El desafío de la masificación
Hoy, los anillos inteligentes aún no llegaron al público general por una cuestión clave: el precio. Mientras que una smartband básica puede conseguirse desde los $30.000, los anillos multiplican ese valor por diez. A eso se suma el hecho de que la mayoría no se fabrica en el país y llega a través de importadores, con los sobrecostos que eso implica.
En ese sentido, su penetración en el mercado argentino dependerá de una baja de precios, más opciones disponibles y, quizás, de la entrada de marcas locales o regionales que ofrezcan modelos más accesibles.
Un futuro cada vez más conectado
Más allá del contexto local, la tendencia es clara: los dispositivos inteligentes se miniaturizan y se vuelven cada vez más integrados a nuestro cuerpo y estilo de vida. En este escenario, los anillos inteligentes representan una nueva frontera en el monitoreo personal, combinando tecnología, salud y diseño en un solo producto.
Si bien por ahora son una novedad costosa, podrían convertirse, con el tiempo, en un estándar más del universo tech que llevamos puesto.
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.