14/01/2025
A casi cinco años del brutal asesinato de Fernando Báez Sosa, su madre, Graciela Sosa, vive atrapada en un duelo que parece eterno. La vida que compartía junto a su esposo Silvino y su único hijo quedó destrozada aquella madrugada del 18 de enero de 2020, cuando Fernando fue asesinado a golpes por un grupo de rugbiers a la salida de un boliche en Villa Gesell.
'Para nosotros, el tiempo se detuvo. Vivimos de los recuerdos de Fernando, de tantas cosas lindas y hermosas compartidas con él', cuenta Graciela en diálogo con TN. A pesar de los años transcurridos, el dolor sigue siendo tan punzante como el primer día. 'Para mí, la vida se acabó para siempre porque toda esa fuerza, toda esa alegría que tenía con Fer, ya no la voy a tener nunca más', confiesa conmovida.