26/07/2024
Después de idas y vueltas, la diferenciación entre el presidente y la vice está cada vez más expuesta. ¿Ruptura o impasse?
Por
Rocío Kalenok
Los
comentarios de Victoria Villaruel sobre Francia en relación al escándalo
protagonizado por un jugador del seleccionado nacional, han elevado la interna
dentro de LLA a niveles inhóspitos. "No
la echa porque no puede" repiten asesores, analistas, periodistas e incluso
algunos legisladores. La postal que dejó el 9 de julio entre las autoridades
máximas de Gobierno y nos referimos a la foto entre Javier y Karina Milei con
Victoria Villaruel quedo atrás; no hay
gestos de cofradía y tampoco se intenta disimularlo.
"Ella es indispensable y es
su reemplazo, es el mismo problema que tienen todos los vicepresidentes en
Argentina" dice Hernán Madera, analista político.
El problema de Argentina es que estos conflictos no se resuelven
tan bien como en otras partes del mundo. El ejemplo más cercano ha sido la
pelea entre Cristina y Alberto Fernández (2019-2023) pero claro ha habido otros
enfrentamientos históricos: Carlos Menem y Eduardo Duhalde (1989-1995),
Fernando De la Rúa y Carlos Álvarez (2000-2001), Néstor Kirchner y Daniel
Scioli (2003-2007), Cristina Kirchner y Julio Cobos (2007-2011). Casi nunca terminan bien
La pregunta que hoy muchos se hacen es si esta disputa en
particular es o no irreconciliable poniendo luz sobre varios puntos. Tanto Javier Milei como Victoria Villaruel
son los políticos que, en términos generales tienen mayor imagen positiva, e
incluso en algunos lugares la imagen de la vicepresidente supera a la de Javier
Milei.
"Villarruel supera a Milei en
algunas provincias en imagen positiva, como por ejemplo en Río Negro y Neuquén,
ella está por arriba del presidente. Lo supera a él en encuestas en algunos
lugares en particular. Además, está cerca del PRO y está cerca del PJ, pues no
le queda otra porque en el Senado el PJ es fuerte. Yo creo que lo nuevo, lo
diferente es que ella ahora supera a Milei en algunas provincias".
Según el Monitor Nacional de Proyección Consultores, el último
dato de imagen positiva de Victoria Villaruel alcanza el 47,2 %. El de Javier
Milei se encuentra apenas por debajo con un 46,1%. Claro está en que no es una
gran diferencia como la que, si se plantea tal vez en imagen negativa; para
Villaruel está en torno al 40% y para el presidente casi en 49%.
Manuel Zunino, director de PC, profundiza en este punto. Milei entendió que no puede perder centralidad y todo el tiempo está tratando de tenerla, exacerbar su personaje, dominar la agenda.
Manuel Zunino, director de PC
"Dentro del sistema Milei hay dos planetas que pueden
eclipsarlo, son Mauricio Macri y Victoria Villarruel. Macri porque es el líder
del espacio socio de Milei en términos legislativos, en la Cámara, y además
porque es un dirigente hábil, un jugador hábil, al que tiene que mirar siempre
con cuidado. Victoria Villarruel porque es el otro emergente novedoso de la
política de estos tiempos y hoy tiene niveles de imagen incluso superiores a
él, en términos positivos, pero también menor nivel de rechazo. O sea, son dos
figuras que pueden generarle un problema con esta centralidad".
Esos datos permiten que Villaruel presente mayor autonomía. No pasa desapercibida y lo sabe. Representa una derecha más tradicional, no exactamente al liberalismo. Además, está claro que la minoría parlamentaria de LLA, coloca al partido en una situación casi de marginalidad en caso de no querer tender puentes con la oposición dialoguista; y ese es el otro gran punto de esta discusión. ¿Quién necesita más al otro?
Javier
Milei necesita a Victoria Villaruel por su lugar en el Congreso, necesita que
"juegue bien" según los intereses del presidente. Pronto el Senado va a tratar
los pliegos para la Corte Suprema. El rol de la vice y sus alianzas serán
determinante para ello y lo que pueda suceder con los pliegos de Lijo y
García-Mancilla, los postulados por el Gobierno.
El otro tema dentro del Congreso es el rol de Martin Menem. Está
claro que el sigue los pasos que le marcan, está bajo la órbita de "la jefa"
pero el escándalo por la visita de un grupo de seis diputados del bloque
de La Libertad Avanza al penal de Ezeiza para conversar con
detenidos por delitos de lesa humanidad y más precisamente con el
marino Alfredo Astiz sigue generando ruidos internos sobre todo por la
utilización de un vehículo oficial bajo su autorización.
Como todo tiene que ver con todo, esto agrego tensión al conflicto
diplomático porque Astiz fue condenado por su participación en el secuestro y
desaparición de las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet. Organismos de
Derechos Humanos de Francia denuncian que "el objetivo de la visita de los
legisladores es asegurar a los condenados que sus condenas serían pronto
anuladas y que serían puestos en libertad". Así lo enuncio Sophie Thonon-Wesfreid,
abogada de las familias de franceses desaparecidos en Chile y Argentina,
y Jean-Pierre Lhande, en una carta
publicada recientemente bajo el título "Francia no olvida".
La pregunta dentro del oficialismo es si la visita de esos
legisladores ha echado leña al fuego para la aparición de algunos carteles que,
en la visita del presidente Milei a Francia por los Juegos Olímpicos, lo hayan
declarado como "persona no grata". Claro
está que para el presidente es de suma importancia su imagen a nivel
internacional.
Aunque desde el oficialismo le quieren quitar entidad al
escándalo, la oposición o más precisamente UxP busca aliados para que se
apliquen sanciones a aquellos que visitaron a los genocidas.
Hasta ahora, durante los cuestionamientos respecto del rol de
Martin Menem presidiendo la Cámara de Diputados, aparece Cristian Ritondo como
un posible reemplazo para ese lugar.
"Es casi imposible. Sería un escándalo
y una jugada muy arriesgada. Menem está haciendo un buen trabajo con los pocos
diputados que tienen" dice
Hernán Madera y ese es el otro punto del debate inicial para Javier Milei: controlar su propia fuerza.
Los
desplazamientos en el oficialismo son moneda corriente, la lista de
funcionarios es realmente larga pero el punto esta justamente en aquellos que
simplemente no pueden ser corridos como es el caso de la vice.
Cuál
es el costo de la intransigencia para el oficialismo
o que postura adoptara en relación la rebeldía de Villaruel, cuando es evidente
que su lugar no solo es inamovible, sino que además con su autonomía tiene más
para ganar que para perder.
Para el consultor Zunino, el principal desafío que tiene Javier
Milei "es poder hegemonizar ese campo oficialista, de alguna manera conducir y dominar ese campo oficialista que hoy es
una gran coalición entre estos sectores, sobre todo sectores del PRO, poder
representar a sus votantes, convertirse
en la primera opción y achicar el margen de maniobra de sus socios o sus
aliados al interior de la coalición para que no puedan condicionarlo demasiado
y ser él el que lidera todo ese conjunto, todo ese sistema o ese campo
oficialista antiperonista donde hoy tiene buena imagen pero sabe que eso no es
permanente. La alianza que
construyó con el PRO, que fue una alianza sobre todo electoral y después una
alianza parlamentaria, tiene que poder consolidarla y poder ser él el que
lidere ese conjunto".
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