Murió OJ Simpson, la ex estrella de fútbol americano que saltó a la fama mundial por un juicio por asesinato

Víctima de un cáncer de próstata, la ex estrella de fútbol americano OJ Simpson falleció este miércoles a los 76 años. La noticia la dio a conocer su familia a través de las redes sociales.

"El 10 de abril, nuestro padre, Orenthal James Simpson, sucumbió a su batalla contra el cáncer", anunciaron, a través de la cuenta de Twitter de quien fuera running back de Buffalo Bills y San Francisco 49ers.

"Estaba rodeado de sus hijos y nietos. Durante este tiempo de transición, su familia pide que se respeten sus deseos de privacidad y gracia", agregaron en el texto.

Simpson se hizo notoriamente popular en Estados Unidos por su carrera en el fútbol americano. Primero a nivel universitario, donde obtuvo el premio Heisman a mejor jugador con la Universidad del Sur de California y fue considerado como uno de los mejores prospectos.

Posteriormente, desarrolló una increíble carrera profesional a lo largo de once temporadas en las que tuvo una temporada de más de 2.000 yardas -fue el primero en romper esa marca-, ganó cuatro títulos a mejor corredor y fue invitado cinco veces al Pro Bowl.

No obstante, Simpson cobró notoriedad a nivel mundial una vez retirado, en junio de 1994, cuando se vio involucrado en las páginas policiales.

Mientras comenzaba su carrera actoral, que lo tuvo como actor de reparto en una de las películas de la saga La Pistola Desnuda, quedó involucrado en el asesinato de su ex esposa Nicole Brown y su amigo Ronald Goldman en Los Ángeles.

Por algunos antecedentes de hechos de violencia, el ex deportista fue considerado sospechoso e intentó escapar a bordo de una camioneta Ford Bronco blanca, cuya huida fue transmitida en vivo y en directo por la TV de todo el mundo.

Posteriormente, fue sometido a un proceso que fue considerado a posteriori como "El Juicio del Siglo" y determinó si era culpable o no. Bajo un manto de sospechas, finalmente OJ fue absuelto por el jurado.

Sin embargo, la estrella caída en desgracia fue condenada en la Justicia civil y tuvo que abonarle a las familias de las víctimas más de 30 millones de dólares. Al invertir en abogados y una vida de lujos, quedó prácticamente con las manos vacías.

Por eso mismo, años después, intentó robar algunas pertenencias que había vendido para recuperar algo de dinero. La movida no le salió bien, porque fue capturado y terminó siendo condenado a prisión.

Al salir, Simpson ya no era el ídolo que supo ser, ni tenía el estatus de celebridad posterior a su carrera deportiva. Basta ver sus posteos en las redes, donde predominaban las respuestas sobre el presunto crimen que cometió.

Un ejemplo de eso es lo que ocurrió tras su fallecimiento. A pesar de ser uno de los mejores jugadores de su historia, La Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) hizo caso omiso a su partida y no se pronunció al respecto, al igual que los equipos en los que brilló dentro del campo de juego.