El conflicto en el sector cárnico dio un respiro este viernes, luego de que empresarios y sindicatos acordaran levantar el paro previsto. Sin embargo, ambas partes advirtieron sobre el riesgo de desabastecimiento en los próximos días si no se resuelven los problemas de fondo que afectan a la industria.

El freno de la medida de fuerza llegó tras intensas negociaciones entre el Gobierno, los frigoríficos y el gremio de la carne. Aun así, la incertidumbre persiste, ya que el sector enfrenta dificultades económicas, caída en la producción y un mercado interno golpeado por la inflación.

¿Habrá carne en las góndolas?

Pese a la tregua, desde la industria alertan que si no se logra estabilidad en los costos y en la demanda, el abastecimiento podría complicarse en las próximas semanas. Los frigoríficos advierten que la baja rentabilidad y la falta de incentivos están afectando la producción, mientras que los trabajadores reclaman mejoras salariales y condiciones dignas.

¿Qué va a pasar con Argentina y los argentinos?

La carne es un símbolo de la mesa de los argentinos y cualquier tensión en el sector impacta directamente en el bolsillo de los consumidores. Con precios que siguen subiendo y una oferta que podría reducirse, la preocupación crece en los hogares y en el comercio.

El Gobierno busca evitar nuevos conflictos, pero el escenario sigue siendo incierto. Si no se toman medidas estructurales, el riesgo de desabastecimiento y aumentos de precios podría ser una realidad en poco tiempo.

Por ahora, la carne sigue en las góndolas, pero el futuro del sector sigue en vilo.