La planta industrial de Atanor en San Nicolás fue cerrada de forma total y preventiva tras detectarse un caso severo de contaminación ambiental sobre la vera del Río Paraná, según confirmó la Autoridad del Agua (ADA) de la provincia de Buenos Aires.

La medida fue tomada luego de una inspección realizada el 9 de junio, cuyos resultados de laboratorio comprobaron la presencia de sustancias altamente tóxicas, como glifosato, atrazina y clorpirifos —este último, prohibido en el país—, además de compuestos peligrosos como fenoles y metales pesados, incluyendo arsénico, plomo y cromo.

Los efluentes industriales eran vertidos a través de un ducto autorizado únicamente para desechos cloacales, en una flagrante violación de la Ley Nacional de Residuos Peligrosos, informaron fuentes del caso a Noticias Argentinas.

Denuncias previas y respaldo de ONGs

La clausura se produjo tras semanas de reclamos públicos de vecinos, el Foro Medio Ambiental (FOMEA) y Greenpeace Argentina, quienes denunciaron reiteradamente prácticas contaminantes de la firma agroquímica.

Al momento de la inspección, Atanor afirmó que no hubo contaminación. Sin embargo, en los análisis se detectaron agroquímicos y metales pesados. Este hecho de contaminación es un ejemplo más de los reiterados que vecinos y organizaciones denunciamos”, expresó Agostina Rossi Serra, vocera de Greenpeace.

Polémica. La empresa está señalada por contaminar el río Paraná.
El Cronista

Rechazo al plan de relocalización parcial

Frente a la clausura, la empresa anunció su intención de relocalizar sus operaciones, pero con la polémica decisión de mantener un centro logístico de productos peligrosos en el mismo predio, lo que generó una ola de repudio en la comunidad local.

La relocalización figuraba en nuestra demanda. Ahora la empresa, acorralada, anuncia su traslado. Sin embargo, antes debe hacerse cargo del enorme pasivo ambiental que generó. No vamos a aceptar que en ese lugar se instale un polo logístico de agrotóxicos, es criminal acopiar esas sustancias junto a un barrio y frente a una escuela”, advirtió Fabián Maggi, abogado de los vecinos.

Medidas ordenadas por la Autoridad del Agua

Además del cierre, la ADA intimó a Atanor a cegar el ducto industrial en un plazo de 24 horas y a presentar un plan detallado para desmantelar la planta de tratamiento de residuos. La situación podría escalar hacia acciones judiciales y sanciones económicas, mientras se evalúan los daños ambientales producidos en la zona.