Crimen en Villa Crespo: la impactante reconstrucción de los hechos
La reconstrucción del crimen reveló detalles estremecedores: los peritos determinaron que la mujer asesinó a su esposo e hijos y luego se quitó la vida. Las evidencias, la carta final y los medicamentos hallados en la escena refuerzan la hipótesis.
Los resultados forenses aclararon el caso que conmocionó a Buenos Aires
Una investigación forense confirmó la hipótesis más temida sobre la tragedia familiar en Villa Crespo: Laura Leguizamón, quien se encontraba bajo tratamiento psiquiátrico, fue la responsable de asesinar a su pareja y a sus dos hijos adolescentes en el departamento familiar.
Los datos surgieron tras la autopsia practicada a los cuatro cuerpos, que permitió reconstruir el orden de los hechos. Según fuentes judiciales, “primero mata al marido, luego va a la pieza. Los nenes dormían en cuchetas y uno sale corriendo herido y lo termina rematando en el comedor”, mientras que “el otro hijo quiere correr al dormitorio y lo mata en el pasillo”.
El nivel de violencia sorprendió a los peritos
El parte pericial detalló que Adrián Seltzer, esposo de Leguizamón, recibió tres puñaladas mientras dormía o se encontraba sedado. En cambio, los adolescentes intentaron defenderse, motivo por el cual fueron apuñalados entre diez y doce veces cada uno.
Después de cometer los asesinatos, Leguizamón se acostó junto a su pareja y se produjo cortes profundos en el cuello y las muñecas. En ese estado, escribió una carta breve y desordenada antes de morir. “Va a la habitación, se acuesta al lado del marido, se da los cuchillazos, se arrastra y muere en el baño”, relataron las fuentes. Añadieron que “la mujer tenía una lesión grande en el pecho, además tenía lesiones autoinferidas en las muñecas. En el cuello una uña clavada que fue retirada y podría ser de uno de sus hijos. Tenía pelos en las manos o pelusas mezcladas con pelos”.
La carta final, otra pieza clave en la reconstrucción
El mensaje escrito por Leguizamón fue hallado manchado de sangre y redactado en una mezcla ilegible de imprenta y cursiva, con signos de incoherencia. Solo se logró descifrar una frase: “Todo mal fue mucho. Los amo. Mal, perverso”.
Este documento, junto con los resultados de las pericias, refuerza la teoría de que los homicidios fueron cometidos de forma premeditada, en un contexto de desequilibrio mental grave.
Medicación psiquiátrica y antecedentes
En el lugar del crimen, los agentes secuestraron tres tipos de medicamentos vinculados a tratamientos mentales. Una de las cajas contenía Sertralina Rospaw 50 mg, un antidepresivo. También se halló Midax 10, un ansiolítico, y Olanzapina 10 mg, un antipsicótico. Varios de los blísteres estaban vacíos, lo que coincide con las declaraciones de la hermana de la mujer, quien había advertido que Laura estaba bajo seguimiento psiquiátrico desde hacía tiempo.
Así se encontraron los cuerpos en el departamento
La escena del crimen, ubicada en Aguirre al 200, barrio porteño de Villa Crespo, fue descubierta por la empleada doméstica al ingresar al domicilio. El orden en que fueron encontrados los cuerpos permitió reconstruir el desarrollo de la tragedia.
En el pasillo, yacía Ivo Seltzer, de 12 años, quien habría intentado escapar del ataque. En el comedor, fue hallado Ian Seltzer, de 15 años, con múltiples puñaladas; el joven fue atacado en su habitación, logró desplazarse herido y murió en esa zona. En el baño, estaba Laura Leguizamón, con heridas autoinfligidas. Finalmente, en la habitación matrimonial, fue encontrado sin vida Adrián Seltzer, aparentemente dormido o bajo los efectos de sedantes, ya que no presentaba signos de defensa.
Las primeras estimaciones indican que el crimen múltiple se cometió entre la noche del martes y la madrugada del miércoles.