Una insólita polémica en torno a un pato mantiene enfrentados a vecinos de la zona centro de la Ciudad de Mendoza que denunciaron que el ave, que pertenece a una florista de Avenida San Martín, ya ha agredido a otras mascotas que circulan por la zona, lo que llevó a que los comerciantes del lugar reclamaran por el desalojo del pato Juan, convertido en una verdadera celebridad del centro de la capital mendocina.

La disputa se inició con la presentación de reclamos por parte de comerciantes y vecinos a la Municipalidad de Mendoza para reclamar por el desalojo del animal en la peatonal. Su propietaria, Margarita Flores, quien se desempeña como florista y serena del local acató la orden de las autoridades de mudar al animal de la peatonal, aunque nunca imaginó la reacción popular que sobrevendría a esa acción.

En cuestión de horas, la gente organizó una juntada de firmas en las redes sociales para exigir el regreso de Juan a la peatonal mendocina. En pocos días, la solicitud juntó alrededor de 7 mil firmas en apoyo al retorno del ave, que ya hacía parte del paisaje del microcentro mendocino.

LEE MÁS:

Los vecinos montaron un pequeño altar en la peatonal en donde exigen el regreso de Juan y dejan muestras de apoyo al ave.

LEE MÁS:

Nunca se supo de manera oficial cual fue el disparador por el que los comerciantes reclamaron la mudanza del pato Juan. Una de las versiones apunta a que habría atacado a un perro que circulaba por la zona, por lo que de esa manera, se encontró el justificativo perfecto para reclamar ante las autoridades por su traslado.

Sin embargo, la historia de Juan, lejos está de acabar allí. En las últimas horas, se supo que Alfredo Mellado, un abogado penalista especializado en defensa animal solicitó una revocatoria al traslado del ave. “Se trata de un instrumento jurídico de corte administrativo, procurando que la Municipalidad reconsidere la medida dispuesta y que se restituya el animal a su mamá humana, como le llamamos nosotros en derecho animal”, aseguró.

Al ímpetu de Mellado, debe agregarse que en las últimas horas, vecinos y comerciantes que se manifestaron en favor de la permanencia del ave en la peatonal del centro, montaron un "altar", en donde además de dejar muestras de apoyo en favor del regreso del ave, también adjuntaron parte de las firmas recolectadas para exigir su retorno.

Lo cierto es que por el momento el destino de Juan es incierto. A la espera de una resolución por parte de la Justicia sobre su situación, Juan aguarda para regresar a la peatonal, que a pesar de no ser su hábitat natural, era donde se encontraba habitualmente, en compañía de su propietaria, y a quien los transeúntes y turistas habían convertido en una verdadera celebridad del microcentro mendocino.