“Cada vez que un jubilado cobra su haber mensual, ese dinero no se guarda, no se esconde y mucho menos se congela. No tenemos margen para lujos ni para especulación. Lo que recibimos se transforma de inmediato en lo más esencial para nuestra vida: alimentos, medicamentos, alquiler, impuestos, servicios, transporte, ropa… y todo aquello que sostiene la dignidad de cada día” explica Jorge Dimuro de “La Voz del Jubilado”.
 

Los jubilados: el motor invisible que mantiene viva la economía
Los jubilados son claves para la economía como explica el autor.

Además remarca que “Cada peso que pasa por nuestras manos vuelve, sin demora, al circuito económico. Somos uno de los sectores que más rápido y de manera más ordenada hace circular el dinero. No especulamos en la bolsa, no fugamos capitales, no acumulamos fortunas en paraísos fiscales. Lo nuestro es claro y simple: consumimos, pagamos y cumplimos”.
 

Di Muro también explica que "Al hacerlo, sostenemos almacenes de barrio, farmacias, supermercados, verdulerías, transportistas, talleres, empresas de servicios y toda una cadena que genera empleo y mueve la rueda productiva. Somos un engranaje silencioso, pero indispensable, para que el país siga funcionando.
Por eso, mejorar las jubilaciones no es un gasto: es una inversión con retorno inmediato. Un jubilado con un haber digno no solo vive con mayor tranquilidad, sino que multiplica la actividad económica, reanima el mercado y ayuda a que todos vivan mejor."
 

Un Mensaje a los Gobiernos

El autor concluye con un mensaje directo a las autoridades, instándolas a comprender que cada peso invertido en las jubilaciones regresa con fuerza a la economía “Los gobiernos deben entenderlo: cada peso que invierten en los jubilados regresa con fuerza al corazón de la economía argentina”.
 

Consigna: "Jubilados dignos, economía viva"