A través de los decretos 458 y 459 el Gobierno de Javier Milei confirmó en el Boletín Oficial la disolución del Instituto Nacional de Medicina Tropical (INMET) y su integración al Instituto Malbrán, junto con la creación de la Administración Nacional de Establecimientos de Salud (ANES), que se espera administre cinco hospitales nacionales. Las reformas fueron publicadas antes de la finalización de las facultades delegadas concedidas a la administración libertaria.

Entre las reformas establecidas por los decretos 458 y 459, se encuentra la decisión del Gobierno Nacional de poner bajo la órbita del Ministerio de Salud al Instituto Nacional del Cáncer que, de esta manera, dejará de ser un organismo descentralizado.

LEE MÁS: Trump estalla contra Elon Musk tras el anuncio de un nuevo partido: “Está fuera de sí, es un desastre”

Los argumentos del Gobierno para justificar esta reformas se basan en el objetivo de mejorar la “eficiencia” de los organismos en cuestión y “eliminar la duplicidad de tareas”, entre otros.

Más motosierra: el Gobierno disolvió el Instituto Nacional del Cáncer
Javier Milei junto al ministro de Salud, Mario Lugones.

LEE MÁS: Pampita defendió a Benjamín Vicuña tras las acusaciones de la China Suárez: "Es un padre amoroso"

Por su parte, en lo que concierne al Instituto Nacional de Medicina Tropical (INMET) el Gobierno de Milei dispuso su disolución e integración a la órbita del Instituto Malbrán, bajo el propósito de “unificar” líneas de investigación y la planificación integrada de estrategias sanitarias articuladas a nivel nacional.

Respecto a los hospitales nacionales, Baldomero Sommer, Alejandro Posadas, Ramón Carrillo, Laura Bonaparte y el Instituto de Rehabilitación Psicofísica del Sur quedarán bajo la supervisión de la flamante Administración Nacional de Establecimientos de Salud, mientras que el Instituto Nacional del Cáncer desarrollará sus tareas bajo la órbita del Ministerio de Salud, lo que se traduce como una pérdida de autonomía en el organismo que funcionaba como una dependencia descentralizada de la cartera conducida por Lugones.

Las reformas aplicadas en los decretos 458 y 459 se suman a la eliminación del sistema de residencias dispuesto por el Gobierno nacional, que ha despertado un masivo rechazo en el sector hospitalario y en los gremios estatales y vinculados a la salud.