Central Ballester volvió a su casa después de 26 años: "No queremos ver a los pibes de San Martín en las esquinas, tienen que venir al club"

Central Ballester cumplió su sueño: después de jugar de local en 16 canchas distintas, el Canalla volvió a su casa en Sarratea 10500, José León Suárez. Donato Lanzillotta, presidente del conjunto de San Martín, habló en exclusiva con Mundo Poder y mostró su emoción por haber concretado el anhelo y afirmó que buscan que el Cacique, paso a paso, sea un lugar para sacar a los pibes de la calle y que tengan un lugar de contención.

Después de 26 años, Central Ballester pudo cumplir el sueño de tener su propia casa. Tuvieron que pasar 400 partidos y recorrer 16 canchas para que el hincha del Canalla vuelva a Sarratea 10500, José León Suárez. Mundo Poder se acercó hasta las instalaciones del estadio en la victoria del conjunto de San Martín frente a Muñiz por 3 a 0, en un partido correspondiente a la cuarta fecha de la Primera D.

Posteriormente, en una entrevista exclusiva, Donato Lanzillotta, presidente de Central Ballester, contó cómo se concretó el sueño: “Yo estaba reunido con un grupo que era parte de la hinchada. Me dijeron si quería ser presidente y así nació. Empezamos a trabajar, a juntar plata, a hacer obras y se fue haciendo. Formamos la comisión directiva y, entre todos, lo fuimos haciendo de a poquito. El único sueño que teníamos era hacer la cancha y se cumplió. Tardamos casi cuatro años. Todavía falta, no hay que relajarse, hay que seguir. Mientras yo esté, voy a seguir haciendo obras. Si me eligen nuevamente, seguiré”.

Además, expresó que tuvieron mucha ayuda para concretar la ilusión que se habían planteado hace algunos años. Desde auspiciantes hasta la contribución de la política local: “Para hacer la cancha se fue guardando la plata de los sponsors, venta de camisetas, de los socios. José María (Fernández) de la Municipalidad de San Martín nos dio una mano muy grande y así empezamos. En el momento de la pandemia, no se jugaba al fútbol y la AFA nos seguía bajando la plata y eso lo íbamos guardando. Había que ponerle ganas y se le puso. Fueron tres, cuatro años de laburo, peleas, de discutir, pero el objetivo se logró”.

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La localía pesa mucho en la Primera D: dos partidos, dos victorias para el Canalla en Sarratea 10500

A pesar de tener el estadio propio, Lanzillotta afirma que los egresos son prácticamente los mismos, aunque ahora hay ingresos de entradas: “No se ahorra tanto, al contrario, gastamos más. Ahora, tenés que pagar los servicios de la gente que corta la entrada. Son los mismos gastos que si estaríamos alquilando. El tema es que te entra plata por las entradas que puede ser mucha o poca. Nosotros vemos mucha gente en la cancha, pero después no es tanto el ingreso, porque tenemos socios. Lo que pasa es que la localía vale muchísimo, te hacés muy fuerte, el aliento de la gente es importantísimo. No es lo mismo jugar en una cancha alquilada. Tenemos sentido de pertenencia, tenemos casa. Siempre dimos vuelta por todos lados y ahora podemos jugar de local”.

Lanzillotta: "Yo quiero que conozcan a Central Ballester, no a mí, las personas están de paso"

También, contó sus sensaciones personales de poder hacer realidad algo que se había planeado hace mucho tiempo: “La gente de San Martín necesitaba que Ballester tenga su cancha. Falta hacer otra tribuna, falta mucho, pero ya se arrancó. Toda persona en la vida tiene que tener metas. A mí se me puso que teníamos que hacer la cancha y lo logramos. En lo personal es una satisfacción haber conducido eso. Yo mucho trabajo no hice, lo único fue pensar, el trabajo lo hicieron los muchachos. Es lindo cuando se te concreta algo que planeaste".

Y añadió: "Es una alegría muy grande, ver esa gente ahí en Ballester. Te sentís como en las nubes. Yo tengo 65 años y, para mí, es algo hermoso. No hay una palabra para decir lo que siento. Te invade el cuerpo, el corazón, ves tanta gente llorando. Yo quiero que conozcan a Central Ballester, no a mí, las personas están todas de paso. El club es nuestro patrón y tenemos que cuidarlo. No hay que olvidarse nunca de la gente vieja que empezó todo esto. Gracias a ellos, nosotros lo terminamos”.

El Municipio de San Martín tendrá otro lugar de contención en José León Suárez: "Vamos a tratar de integrar a los chicos del barrio poco a poco"

Por último, afirmó que el Cacique no es el único beneficiado en tener la cancha en José León Suárez, sino que el propio municipio también: “San Martín gana movimiento, seguridad cuando hay partidos y, poco a poco, nosotros vamos a tratar de integrar a los chicos del barrio cuando podamos hacer las canchas del Baby. Empezar a que el barrio sienta que es un club donde la gente pueda llevar a sus chicos, se pueda divertir. Hacer un buen lugar para que hagan gimnasia. Hay muchos proyectos, pero no nos podemos apurar. Tenemos que sacar a los chicos de la calle. No queremos ver a los pibes en la esquina, tienen que salir de eso y venir al club. Eso es lo que busca todo dirigente de una institución”.