El crimen ocurrió en la madrugada del 19 de marzo de 2023 en el barrio Rivadavia, partido de Merlo cuando, en horas de la madrugada, Alan se dirigía junto a un amigo a un quiosco del barrio a bordo de una moto. En el camino se cruza con dos sujetos, uno de ellos Juan Manuel G. conocidos de la zona, los cuales los interceptan y le piden la moto a lo que Alan responde "que me vas a rastrear si somos del barrio".

Sin embargo, los sujetos insisten y Claudio, quien conducía el vehículo continúa el recorrido.

Juan Manuel a bordo de otra moto, esta vez junto a su pareja, comienza a perseguirlos, saca un arma de entre sus prendas y comienza a disparar. Lo hace al menos seis veces.

Uno de los disparos, impacta en la espalda de Alan. Claudio pierde el control de la moto y su amigo herido queda tendido en el piso desangrándose en Av. Sica entre Kennedy y Zarraga.

Poco después un móvil policial arribó al lugar, pero Alan ya estaba muerto.

"Hasta el momento estamos tratando de poder hacer justicia porque no pueden detener al asesino porque en los videos no se le ve bien la cara y por otro lado los testigos eran vecinos del barrio y tienen miedo y nadie quiere meterse porque ya los conocen" relató Mayra, hermana de la víctima.


Además, un testigo clave, en un principio reconoció a los responsables, pero poco después cambió su declaración por miedo a represalias.

Desde entonces, la impotencia de la familia y el temor de que la detención de los responsables de la muerte del joven no sea posible, la causa se cierre y todo quede impune.

Por su parte, Rodrigo Tripolone, el abogado de la familia Leiva declaró a este medio: "sabemos quién es el autor del hecho. Lo sabe el barrio, su familia. Es un criminal que tuvo participación en otros delitos sangrientos. Pero los testigos tienen miedo. Esperamos poder ubicarlo en la escena del crimen pronto, pero aun así necesitamos que quienes lo vieron asesinar al joven, presente su testimonio".

Alan era papá de tres nenas que hoy tienen 4, 5 y 7 años, era albañil, alegre, buen hijo y hermano. Así lo recuerdan sus allegados.

"No tengo palabras. El dolor desgarra mi alma totalmente. De la Justicia pienso que deja mucho que desear porque no puede ser que, aun teniendo videos, sabiendo quien fue el asesino y sus cómplices no podamos probarlo" expresó Marcela, mamá de Alan en entrevista con este medio, "de los testigos no entiendo por qué no quieren declarar. Sé que tienen miedo porque fueron amenazados, pero yo les digo ¿duermen tranquilos sabiendo lo que pasó, sabiendo que esa madrugada la delincuencia se llevó la vida de mi hijo?"

En su momento el fiscal a cargo de la causa Guillermo Rodríguez Rey de la UFI 1 DE Morón había solicitado a la familia de la víctima que lleven testigos que puedan aportar más datos a la causa y concluyó que los videos aportados no eran evidencia suficiente para imputar a los hombres señalados.