Colombia: el gobierno de Petro abatió a un importante jefe guerrillero de las disidencias de las FARC
El golpe al Estado Mayor Central (EMC) se produce en medio de una escalada violenta que dejó ocho muertos en 19 ataques en Cauca y Valle del Cauca, según informó el presidente Gustavo Petro.
El Ejército colombiano asestó un duro golpe a las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) al neutralizar a Wilmar Pazu Rivera, conocido como alias “Cholinga”, cabecilla del bloque Isaías Pardo del Bloque Occidental Jacobo Arenas, perteneciente al Estado Mayor Central (EMC). La operación, ejecutada el lunes 9 de junio de 2025 en el caserío Las Dalias, municipio de Páez, departamento del Cauca, fue confirmada por el presidente Gustavo Petro y representa un revés significativo para la facción más poderosa de las disidencias, liderada por alias “Iván Mordisco”.
El operativo, llevado a cabo por el Comando Conjunto de Operaciones Especiales (CCOES) con la colaboración de la Policía y el Ejército, se desarrolló en una zona rural del convulso suroeste colombiano. Según Petro, “Cholinga” era un “cerebro” detrás de ataques contra civiles y un reclutador de menores en el Cauca, con una recompensa de hasta 500 millones de pesos (aproximadamente 119.000 dólares) ofrecida por su captura. Su muerte se enmarca en una escalada de violencia atribuida a las disidencias, que el mismo día dejó al menos ocho víctimas fatales, incluyendo dos policías, en 19 atentados con explosivos y hostigamientos armados en los departamentos de Cauca y Valle del Cauca.
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El Ministerio de Defensa interpretó estos ataques como una “reacción desesperada” de los grupos armados ilegales ante las operaciones de la fuerza pública, que han debilitado sus estructuras y economías ilícitas, principalmente ligadas al narcotráfico. Entre los incidentes reportados, un policía fue asesinado por un francotirador en Caloto, Cauca, y otro pereció en la explosión de un autobús bomba en el peaje de Villa Rica, Valle del Cauca.
Estas regiones son bastiones de diversos grupos armados, incluyendo disidencias de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y bandas herederas del paramilitarismo.
La neutralización de “Cholinga” es parte de una serie de acciones contra las disidencias, que surgieron tras la desmovilización de las FARC en 2016 bajo el Acuerdo de Paz. El EMC, bajo el mando de “Iván Mordisco”, se ha consolidado como una de las facciones más activas, involucrada en narcotráfico, extorsión y reclutamiento forzado.
La operación en Páez refuerza los esfuerzos del gobierno de Petro por contener la violencia en el suroeste, aunque el presidente enfrenta críticas por su política de “paz total”, que busca negociar con grupos armados mientras mantiene operaciones militares.