Jorge Castillo, conocido como "El Rey de La Salada" fue procesado con prisión preventiva y embargado por 750 millones de pesos por la Justicia Federal de Quilmes.

Se lo acusa de evasión fiscal, lavado de dinero, asociación ilícita y violación de la ley de marcas.

La investigación, iniciada en 2015 por la AFIP y liderada por los fiscales Cecilia Incardona y Diego Velasco, señala que Castillo y sus socios, Antonio Corrillo Torrez y Aldo Enrique Presa, evadieron más de 142 millones de pesos en Impuesto a las Ganancias y 126.6 millones en IVA entre 2013 y 2017, con intereses que superan los 228 millones.

Castillo fue detenido el 22 de mayo en un operativo con 60 allanamientos en Lomas de Zamora, Flores y Luján, donde se incautaron documentos, dinero en efectivo y vehículos de alta gama.

También se ordenó la detención de otras 20 personas y allanamientos en la feria El Olimpo y galerías de Flores.

La Salada, clausurada tras la detención, reabrió tres semanas después con condiciones.

Entre los requisitos que deberá cumplir para permanecer abierta, se encuentran la presentación de la constancia impresa de suscripción ante el ARCA por parte de los titulares de los puestos; la inscripción de cada empleado en los organismos correspondientes; la emisión de comprobantes de venta; la presentación del contrato de alquiler y la constancia de procedencia de la mercadería en caso de inquilinos; la designación de nuevas administraciones en un plazo de 90 días para regularizar las sociedades, y la incorporación de sistemas bancarizados para el cobro en los predios.

La feria sirve como fuente de trabajo para miles de familias del conurbano bonaerense, pero también del resto del país. Es que cada semana se movilizan comerciantes de locales de ropa, que llegan hasta allí a comprar por cantidad para luego revender.