Este lunes 23 de junio, se reportó una amenaza de bomba en la Quinta Presidencial de Olivos, residencia del presidente Javier Milei.

La amenaza fue realizada por una mujer anónima mediante una llamada al 911, recibida por la Policía Bonaerense alrededor de las 12:30. En la comunicación, la persona afirmó haber colocado un artefacto explosivo en el predio ubicado en la intersección de avenida Maipú y calle Villate, en Vicente López.

De inmediato, se activó un protocolo de seguridad que incluyó el despliegue de la Brigada Antiexplosivos de la Policía Federal Argentina (PFA), con un amplio operativo de rastrillaje en el interior y perímetro de la residencia.

También se restringió el tránsito vehicular y peatonal en la zona, y se sumaron agentes municipales, bomberos de Vicente López, patrullas de Defensa Civil y personal de la División de Delitos Constitucionales para investigar el hecho.

Tras una exhaustiva inspección, la Policía Federal confirmó que la amenaza era falsa, ya que no se encontraron artefactos explosivos ni elementos sospechosos.

La investigación quedó a cargo del Juzgado Federal N°1 de San Isidro, bajo la jueza Sandra Arroyo Salgado y la secretaria Lucía Ochoa, con el objetivo de identificar a la autora de la llamada. El delito de intimidación pública, contemplado en este tipo de casos, puede acarrear penas de entre 2 y 6 años de prisión.

Este incidente se dio en un contexto de tensión internacional, relacionado con el conflicto entre Irán e Israel, lo que llevó a reforzar la seguridad en objetivos sensibles en Argentina, incluyendo 19 edificios vinculados a la comunidad israelí en Buenos Aires. Además, se suma a otros episodios recientes de falsas amenazas de bomba, como las reportadas en estaciones del tren Roca hace diez días.