La Pulpería del Cotorro: el bodegón que conquista con las mejores empanadas tucumanas en Buenos Aires
Los bodegones porteños son el alma de la gastronomía local, y en Parque Patricios, La Pulpería del Cotorro se destaca como un ícono de la tradición culinaria. Desde empanadas tucumanas únicas hasta milanesas creativas, este rincón combina sabores auténticos con precios accesibles en un ambiente cálido y familiar.
Un bodegón que celebra lo mejor de la cocina porteña
En Buenos Aires, los bodegones son verdaderos santuarios del buen comer, y La Pulpería del Cotorro es un ejemplo perfecto de ello. Ubicada
estratégicamente en Parque Patricios, esta joya gastronómica es reconocida por su amplia variedad de platos, su cálida atención y, sobre todo, por sus inigualables empanadas tucumanas.
El plato estrella: empanadas tucumanas
Las empanadas tucumanas de este bodegón no solo son elogiadas por los vecinos del barrio, sino también por quienes llegan desde otros puntos de la ciudad para disfrutarlas. Con una masa perfectamente dorada y un relleno jugoso, estas empanadas representan lo mejor de la tradición del norte argentino.

Más que empanadas: una carta para todos los gustos
Aunque las empanadas tucumanas son su plato insignia, La Pulpería del Cotorro ofrece una carta variada que garantiza una experiencia inolvidable para cualquier comensal. Entre las especialidades destacadas están:
- Milanesa 'Endemoniada': ideal para los amantes del picante.
- Papas 'Bergoglio': una combinación de sabores única que rinde homenaje al Papa argentino.
- El 'Nido del Cotorro': una cazuela de mozzarella con huevo frito, papas y aceitunas.
- Opciones vegetarianas como milanesas de garbanzo o soja.
- Postres clásicos: budín de pan, flan casero y el icónico queso y dulce.

Un rincón con historia y accesibilidad
La Pulpería del Cotorro no solo destaca por su comida, sino también por su ambiente acogedor, donde cada detalle recuerda a los bodegones de antaño. El restaurante está ubicado en Pepirí 320, Parque Patricios, una zona que combina tradición con modernidad.
El acceso es sencillo, ya que está bien conectado con varias líneas de colectivo, como la 32, 75, 65, 133 y 150. Además, el lugar abre al mediodía de lunes a jueves y extiende su horario a la noche los viernes y sábados, ideal para disfrutar de una cena relajada después de la semana laboral.