Juan Martín Lucero defendió a su amigo prófugo tras la denuncia en la fiesta con jugadores de Vélez

Vélez se convirtió en el primer equipo clasificado a las semifinales de la Copa Sudamericana tras derrotar 3-1 a Universidad Católica en Chile y revertir la serie en la que se encontraba en desventaja. El héroe del elenco de Liniers fue Juan Martín Lucero, quien en el ocaso del partido marcó el gol que propició que su equipo se adueñara del pasaje hacia la siguiente ronda. Luego del regreso a Buenos Aires, el delantero se pronunció por primera vez sobre la fiesta que lo tuvo como protagonista, junto a más integrantes del plantel, y donde una mujer denunció haber sido abusada sexualmente por otro invitado.

En primera instancia, el atacante ofreció disculpas por el escándalo acontecido en la reunión privada, que se llevó a cabo hace casi dos semanas. "Aprovecho para pedirle perdón a la gente de Vélez por juntarnos a comer un asado dos días antes de un partido. Fue solo eso, no una fiesta como se dijo. Fue una reunión, un asado que terminó como nadie imagina. Le pedimos perdón a nuestros compañeros, al cuerpo técnico y ahora aprovecho para hacerlo a la gente de Vélez y a la institución", expresó en diálogo con TyC Sports.

Además, el surgido en las Divisiones Inferiores de Defensa y Justicia decidió respaldar de manera pública a su amigo Juan José Acuña, quien continúa prófugo de la Justicia tras haber sido señalado como el responsable de la presunta violación. "Mi amigo Juan, que tampoco hizo nada, la está ligando de arriba por querer ayudar en la situación. Tengo fe en la Justicia y en que mi amigo va a poder salir de esta causa. La está pasando muy mal su familia y hay veces que no se sabe el daño que se genera por dinero o por querer salir en las noticias", manifestó el futbolista.

La fiesta clandestina en la cual participaron jugadores del Fortín se extendió desde el pasado jueves 3 de diciembre hasta el viernes 4/12 y tuvo lugar en el Barrio Camino Real, localizado en el partido bonaerense de San Isidro y donde Lucero alquiló una vivienda. El encuentro, donde habría concurrido un grupo de 20 personas, finalizó en escándalo luego de que una joven denunció un abuso sexual. “No le vi la cara, no sabía quién era. Y después no me acuerdo más nada; me empecé a sentir mal, me mareaba y tenía ganas de vomitar”, afirmó la denunciante en su declaración.

No obstante, una testigo, amiga de la mujer que habría sido abusada, detalló que comenzó a buscarla por la casa después de que transcurriera un largo tiempo sin verla y que no la encontró hasta pasadas las 21.45, cuando la halló desmayada en una habitación y con una jarra de plástico en la mano. En consonancia, advirtió que un “gordo pelado se iba del cuarto mientras se subía los pantalones y soltaba una mueca de sonrisa” y que empezó a solicitar ayuda a raíz del estado de inconsciencia de su amiga.

Además de Lucero, Ricardo Centurión, Thiago Almada y Miguel Brizuela, los otros jugadores del plantel que acudieron a la fiesta en el barrio privado, fueron desligados de la investigación y la institución aseguró que se encuentran a disposición de la justicia para brindar testimonio y colaborar con el esclarecimiento de los hechos. Luego de la clasificación de Vélez a las semifinales de la Sudamericana, Ricky, con pasado en Boca y Racing, publicó una foto en las redes sociales con sus compañeros que participaron de la reunión privada y la acompañó con la frase: “Hermanos, en todas con ustedes. Como dijo el Diego, que la sigan chupando”. Unos minutos más tarde, borró la imagen y volvió subirla con otra leyenda: “En todas, perritos”.