Datazo: La dieta del sexo, la mejor forma de perder peso
Mantenerse en forma es un objetivo complicado en este contexto de cuarentena debido a la problemática del coronavirus. El corte de rutina y mantenerse en aislamiento social dificultan poder realizar actividad física. A pesar de ello existen maneras de perder peso que pueden ayudarnos que nuestra salud este de la mejor manera, y ahí es donde entra la dieta del sexo, en la que podés perder peso y ganar placer. Mirá de qué se trata:
Con la ciencia en la mano se calcula que durante una relación sexual de 20 minutos se consumen aproximadamente unas 150 calorías, un gasto calórico similar al que producen andar o subir y bajar unas escaleras.
La dieta del sexo te asegura que al llegar al orgasmo se pueden eliminar hasta 127 calorías, 500 si se practica en la ducha y, unas 60 calorías al darse un apasionado beso.
La pérdida de peso depende en gran medida de la postura que se adopte durante el coito, por lo cual no estaría de más repasar el milenario pero vigente Kamasutra.
"La dieta del sexo" tiene dos ventajas: una pareja puede practicarla tanto tiempo como quieran -hasta que el cuerpo aguante- y no sólo es un régimen perfecto para quemar calorías, sino un ejercicio completo para todo el organismo.
Los médicos afirman que en efecto, los movimientos pélvicos, la aceleración de los latidos cardiacos, la dilatación de los vasos sanguíneo de las zonas genitales erógenas, la aceleración de la respiración, las contracciones y espasmos musculares, y por último el orgasmo, suponen un gasto de energía, similar al de cualquier ejercicio físico.
Por ello, el sexo puede considerarse como una actividad beneficiosa para adelgazar, aunque su impacto sea muy moderado y dependa de la frecuencia con que se lo practique.
Y es que, además de conseguir deshacerte de esos kilos de más, el sexo tiene muchos beneficios, sobre todo si lo practicas bien temprano.
Te levantarás de buen humor, aumenta las defensas sirve como relajante a primera hora… todo son pros. Además, empezarás el día con una sesión aeróbica, que si luego combinas con una sesión de gimnasio y una alimentación equilibrada, podría convertirse en el secreto para la pérdida de peso, casi, sin esfuerzo.