Lo que tenés que saber

  • En 2025, más trabajadores comenzarán a tributar el Impuesto a las Ganancias debido al ajuste del 11,78% dispuesto por el Gobierno.
  • El nuevo umbral de ingresos mínimos para tributar será de $2.280.700 brutos, lo que implica que los salarios superarán el mínimo exento.
  • Los trabajadores que deduzcan cónyuge y dos hijos menores de 18 años verán un incremento en el piso de tributación a $3.024.494 brutos.
  • Los autónomos también estarán alcanzados por este ajuste, con un rango de ingresos entre $1.468.658 y $1.631.843 para comenzar a tributar.
  • Este ajuste aumenta la presión fiscal, a pesar de las promesas previas de reducir impuestos.

Aumento de trabajadores alcanzados por Ganancias

Este año que recién comienza, una medida del Gobierno llevará a un número significativamente mayor de trabajadores a tributar el Impuesto a las Ganancias. Esto será consecuencia del ajuste del 11,78% en las escalas del impuesto, realizado en función de la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) entre septiembre y diciembre de 2024.

Este ajuste coloca a más empleados en un umbral de ingresos superior, obligándolos a pagar el impuesto que hasta ahora no les correspondía. La medida incrementa la presión fiscal sobre un sector que ya enfrenta una fuerte carga tributaria.

Nuevas escalas de tributación

El mínimo imponible para comenzar a tributar será de $2.280.700 brutos, lo que equivale a un salario neto de $1.892.937, sin deducciones por familiares o gastos personales. Por otro lado, aquellos trabajadores que puedan deducir un cónyuge y dos hijos menores de 18 años verán su umbral de tributación elevado a $3.024.494 brutos, lo que representa un salario neto de $2.516.337.

Además, los trabajadores autónomos también estarán sujetos a este ajuste. Dependiendo de su categoría, los ingresos mensuales promedio para comenzar a tributar se situarán entre $1.468.658 y $1.631.843.

Impacto en la clase trabajadora

Este ajuste en el Impuesto a las Ganancias incorpora a miles de trabajadores y autónomos que anteriormente no estaban obligados a tributar. A pesar de las promesas del Gobierno de una reducción de impuestos, esta modificación incrementa la presión fiscal sobre sectores que ya enfrentan desafíos económicos.