Ginés González García habló con Chiqui Tapia sobre el regreso del fútbol argentino
La Asociación del Fútbol Argentino diseñó un protocolo, que fue enviado a la Liga Profesional de Fútbol, con el objetivo de que los equipos reanuden los entrenamientos en el campo de juego. Sin embargo, las medidas de seguridad sanitaria deben ser trasladadas y requieren la aprobación del Gobierno Nacional para comenzar a ser implementadas.
En este escenario, el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, reveló que mantuvo un diálogo con el presidente de la AFA, Claudio Tapia, sobre el regreso del fútbol argentino: “Yo tuve un pedido de audiencia del señor Tapia hace 10 días y le dije que nuestra decisión es no abrir nada porque estamos en un momento de pico. Me parece que una reunión generaría muchas expectativas”.

El médico hizo referencia a las normas que pretende llevar a cabo el organismo de la calle Viamonte para retomar las prácticas. “Pero ahí quedó, después no tuve ningún pedido. Ahora vi en los diarios que habría un nuevo protocolo. Nosotros hicimos uno. También me llegó un protocolo de Conmebol, pero era solo a los viajes”, expresó en diálogo con Radio Mitre.
El ex embajador argentino en Chile explicó el inconveniente que implica que muchos futbolistas residan en las zonas donde hay más contagios por coronavirus: “El problema es que nosotros tenemos al 75% de los jugadores de fútbol que vive en el AMBA. Teniendo la circulación que tiene el AMBA, hacer cualquier movimiento, aunque sea de entrenamiento, que tiene menos riesgo que los partidos”.
Y agregó: “Los muchachos del fútbol de elite, de Primera, van en auto y vuelven en auto y quizás no tiene riesgo, pero no es lo mismo en otras divisiones o distintos clubes. Es muy masivo esto. No podemos decirle que sí a la Primera y no al resto”.
Por último, descartó la vuelta de la actividad oficial en el corto plazo. “¿Alguien cree que el fútbol va a empezar en julio? No. Además, los preparadores físicos me dicen que un mes les sobra. Entiendo que hay ansiedad, hay mucha presión de los intereses económicos, entiendo que esto es un mega negocio, pero hemos resuelto priorizar los intereses de salud”, concluyó.