De la tradición a la innovación: la escuela que transforma el mate en un negocio global
La misma tiene el propósito de combinar el legado centenario de esta infusión con la innovación
El mate, símbolo de la argentinidad y pasión compartida, vive una evolución que transforma la yerba mate en un negocio sofisticado, comparable al del vino, con más de 400 marcas en el mercado y 2.200 registradas en el INPI, demandando formaciones especializadas como sommelierías, catas y marketing innovador. En este contexto, la Escuela Argentina de Yerba Mate emerge para combinar el legado guaraní con la innovación, buscando conquistar paladares globales a través de la educación.
Orientada a industria, emprendedores, fanáticos del mate y el público general, la Escuela, respaldada por la Universidad Abierta Interamericana (UAI), ofrece diplomaturas certificadas en Sommelier de Yerba Mate, Yerba Mate Blender y Marketing de Yerba Mate, además de cursos cortos online y asincrónicos. “Nuestros alumnos van desde profesionales de la comercialización hasta emprendedores que buscan herramientas para sus negocios, o personas que quieren diferenciar terruños y entender la composición de la yerba”, explicó Liliana Venerucci, directora ejecutiva de las diplomaturas.
La currícula permite profundizar en el proceso de yerbas compuestas, estacionamiento y experiencias sensoriales, adaptándose a una demanda creciente por conocimiento especializado. Venerucci destacó: “Ofrecemos cursos para el público general que desea aprender sin profesionalizarse, desde la composición de palo, polvo u hoja, hasta cómo el terruño impacta el paladar.”Fundada en 2020 por Venerucci y Diego Morlachetti, directores con experiencia en la Escuela Argentina de Té (desde 2009), la Escuela lleva el mate al ámbito universitario por primera vez.
Su diplomatura en Sommelier de Yerba Mate fue declarada de Interés Provincial en Misiones (Declaratoria 302-2023/2024). Ambos conferencistas internacionales, que han dictado formaciones en México, EE.UU., Uruguay, China, India, Sri Lanka y Taiwán, desarrollaron yerbas compuestas para el mercado europeo y promueven la esencia social del mate como un “abrazo compartido” que une culturas.“Rescatamos la tradición y contribuimos a su viaje por el mundo, sin perder su corazón argentino”, afirmaron los fundadores.
Con una metodología que fomenta emprendimientos innovadores, la Escuela Argentina de Yerba Mate posiciona a la infusión como un puente cultural y un negocio en plena expansión, apostando por la evolución a través de la educación y la profesionalización.