La pandemia del coronavirus propone cambios en el mundo de toda índole, desde la economía, pasando por los deportes, las expresiones artísticas y también las cuestiones que hacen a la cotidianidad de las personas. Por las características que conlleva el covid-19, se hace muy difícil pensar en que no habrá cambios estructurales en hábitos y costumbres, aún así si hubiese una vacuna. Uno de los símbolos argentinos y eje de reuniones sociales que está en la mira es el viejo y querido mate. ¿La pandemia viene a sacarlo del mapa o hay una resistencia que mantendrá viva esta tradición?

#ElMateResiste
Durante la cuarentena el consumo de yerba llegó a su récord en los últimos 10 años

El mate es uno de esos rituales que se comparte de manera trasversal en todo el país. “Poné la pava, voy y tomamos unos mates”, es una de esas frases que encierra una conducta social de los argentinos, un punto de encuentro y hasta un divertimento para algunos. Alejados, al menos por un tiempo, de compartir mate y bombilla por una cuestión sanitaria; es posible preguntarse si este virus viene a ponerle fin a una tradición del país o simplemente va a modificar de gran manera ese momento que es mucho más que compartir una infusión.

Mundo Poder dialogó con Karla Johan, Sommelier de Mate (sommelierdemate.com) reconocida por sus conocimientos de la industria. Es la autora del libro “Yerba Mate” y por estos días está presentando su cuarta edición. La misionera estudió la carrera de sommelier y se perfeccionó en este producto después de estudiar yerbateras de Misiones y Corrientes, también formándose en Brasil, Paraguay y empresas en Uruguay. En la actualidad es una referente del sector y dicta cursos online.

Johan considera que justo en medio de la pandemia se da el boom de la yerba mate. Asegura que por estos días tiene más trabajo y que nota interés en diferentes partes del mundo con respecto al consumo de esta infusión tan típica de Argentina.

“En la cuarentena la gente está tomando cada uno con su mate y su bombilla, se incrementó el consumo”, detalla la sommelier y se basa no solo en su experiencia sino en el dato de que el mes de abril fue el mes con mayor consumo de yerba mate en los últimos 10 años. Según informó el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) unos 24,3 millones de kilogramos fueron enviados al mercado interno durante el primer mes de cuarentena completa.La comparación interanual da como resultado un incremento del 3,67%.

#ElMateResiste
Karla Johan dicta talleres y capacitaciones a clientes en diferentes partes del mundo

Para Johan hay dos formas de explicar este fenómeno, uno abordado desde los datos de la industria contemplando a todos los sectores de la cadena de producción, y otras más bien sociológica en la que se analiza los efectos de la cuarentena.

Una explicación es la bajada de línea del INYM, de los productores y los sommeliers, y es que cada uno está con su mate y su bombilla, eso genera por ejemplo un consumo similar al de Siria. Allí se exporta muchísimo porque acostumbran a tomar así por separado, mientras que a nosotros por ahí nos parece raro”, sostiene la sommelier.

En este sentido la explicación al aumento significativo del consumo también se relaciona a que el covid-19 parece que vino a implementar como consecuencia una nueva forma de consumo que llegó para quedarse. “Va a ser más difícil que después de esto uno esté en la oficina, pase alguien que te convide y vos lo tomes así nomás, o por lo menos va a llevar un tiempo volver a eso”.

La otra explicación al crecimiento del consumo de yerba mate durante abril se sostiene desde el entendimiento del encierro, desde la interpretación de una situación completamente atípica a la que las personas buscan acomodarse.

#ElMateResiste
Desde la industria yerbatera entienden que podrían llegar nuevas formas de consumo por la pandemia

“Hay mucha gente que está encerrada en la casa, está trabajando home office y el mate es el compañero ideal para ese tipo de cosas”, analiza Johan y agrega: “Como tercer factor sumaria el aburrimiento porque no es solo el mate, se incrementó el consumo de vinos, cervezas, harina, huevo. La gente está en su casa, se aburre y el mate de ese caso también juega un rol importante”.

El registro histórico de consumo aportado por el IAYM y la explosión del producto Mate a nivel mundial parece darle rienda suelta al desarrollo de una industria. Sin embargo, por una cuestión sanitaria y propia del cuidado del covid-19 en cuanto su forma de contagio, la incógnita es como será el consumo del mate en la “nueva normalidad”.

“Yo creo que por fin vamos a acceder a un cambio de innovación en la Argentina. Hace años que viajo, traigo ideas de afuera y termino encontrándome con una industria que está cómoda en algún aspecto porque vende el paquete de yerba y quiere que siga la cultura del mate cebado, pero yo creo que esta misma situación nos lleva a que por fin empecemos a innovar en el consumo”, analiza la sommelier.

¿Por qué no pensar en el consumo de yerba mate en cervezas?, Johan ha lanzado este producto tiempo atrás y piensa que la pandemia vendrá a provocar un desagregado en la forma de concebir a la yerba mate. Es decir, incorporar a otro tipo de productos como pueden ser blends o bebidas energizantes. “Red Bull lanzó una bebida energizante a base de yerba mate, eso hace a que se tome más confianza sobre la infusión y que sepa que tiene poder energético, alto nivel antioxidante y que no solo tiene que quedarse en consumo del mate con bombilla”.

#ElMateResiste
Mate para uno, la principal hipótesis que busca explicar lo que viene en el futuro

Para este nuevo cambio de consumo Johan analiza que los jóvenes serán el punto fundamental ya que integran un segmento permeable a los cambios y en ellos ya se puede observar algunos cambios de consumo con la búsqueda de productos alternativos, esos mismos que están haciendo crecer la industria más allá de la venta tradicional en el sector.

Los indicadores dan una tarjeta ganadora para el mate en el combate contra el virus en medio de ese cuadrilátero que podría llamarse nueva normalidad. “Hacer futurología es difícil, pero si me quedo con una imagen, las veces que fui a Uruguay, me encontraba en una plaza con tres personas con su termo y su mate. Estaban compartiendo, pero cada uno con su mate, esto ya viene ocurriendo en otros lugares”, analiza Johan.

En este punto la especialista considera que esa tendencia de llevar el mate a la calle, que en el país se ve en provincias del noroeste, puede llegar a contribuir en esa nueva forma de consumo que en principio se vislumbra por la pandemia.

“Yo creo que la tendencia va a ser una mezcla de lo cool del mate con marcas conocidas de termo, yerbas, una inyección de marketing que va a llevar a que la juventud se anime a salir a la calle con su mate y eso va a generar que la ronda siga y se agrande”, destaca Johan.

Compartir de manera diferente, pero seguir compartiendo, ese parece ser el punto para pensar a este símbolo argentino de cara al futuro. No lo den por muerto, hay una resistencia matera a la que no la voltea ningún virus.